Alimentación Intuitiva 2a parte

La alimentación intuitiva no es fácil y lleva tiempo, pero funciona para muchos como una forma de liberarse de la ansiedad que genera la comida y para tener respuestas saludables a los diferentes “apetitos”, ya que suele confundirse el hambre con otros sentimientos como el aburrimiento o la soledad y la comida no calma esto por mucho tiempo. Quizás parezca difícil probar esta propuesta por tu cuenta, así que siempre puedes pedir una sesión de coaching online o una consulta con un nutricionista online.

La alimentación intuitiva no es un pase libre para llenarte de comida chatarra tanto como puedas, o en otras palabras, darte atracones. Se trata de desarrollar una nueva relación con la comida y con tu cuerpo y se trata de cómo alimentarse bien y sano.

Esta noción errónea está enraizada en el hecho de que no hay comidas prohibidas cuando se practica una alimentación intuitiva, por lo que en las primeras etapas los cuerpos de algunas personas pueden pedir más de esos alimentos considerados “malos” que previamente se habían prohibido. Con el tiempo y la práctica esos alimentos “malos” pierden su poder, de forma que una barra de chocolate y una zanahoria pueden llegar a tener el mismo atractivo. La alimentación intuitiva tiene que ver con distinguir entre nuestros diferentes apetitos y descubrir qué es lo que tu cuerpo realmente necesita, sintonizando los mensajes que recibimos naturalmente.

Tiene 10 principios que te ayudan a entender y vivir mejor estos conceptos.