El mejor regalo en familia: Hablar de Sexualidad

Los padres cumplen necesidades fundamentales en los hijos. Brindan el recurso de sostener una vida en desarrollo y evolución constante. Son ellos los que primero deberían ser los educadores de la sexualidad de sus hijos, no solo la escuela. Por tanto, así como entregar cuidado, protección, cariño, afecto, guía y control en muchas de sus áreas de vida, también sería de vital importancia para su salud mental, emocional y física atender las necesidades de amor y respeto en su dimensión sexual.

Este debería ser el mejor de los regalos que puedan ofrecerse en estas fiestas “Hablar en familia de sexualidad”. Crear los puentes necesarios para fortalecer sus lazos y generar fortalecimiento de sus ejes de vida respecto a un área tan importante para su autoestima y crecimiento propio. Así como ser partícipes del vínculo sólido que ayudaría a sostener la positiva futura relación.

No hablar de sexualidad con los hijos produce una brecha y distancia difícil de acortar; que en otras etapas, como la adolescencia, complica y suscita más dificultad en el diálogo y la comunicación. Áreas donde es vital su seguimiento para otorgar un lugar más digno para todos.

Existen derechos a la educación sexual, al placer, a la que nuestros hijos tarde o temprano harán cumplir para ejercer su independencia, autonomía e individuación. Es más saludable que estos sean abordados desde el cariño, el amor, el respeto a su genuina condición de seres sexuados; por los padres. Y así, puedan vivir su vida con coherencia e integridad.